Febrero, el mes del amor. Las tiendas se llenan de flores y lazos rojos que invitan al consumismo, los restaurantes diseñan menús especiales y los hoteles lanzan sus irresistibles ofertas prometiendo una noche de lujo y pasión. ¿Pero qué opciones tenemos este año con nuestro “amor confinado”?
Me imagino un San Valentín con parejas cocinando juntas en casa lo que antes comerían en un restaurante, preparando regalos de forma artesanal, cogiendo flores en el campo para hacer un precioso ramo...
Y esto me gusta. Porque la pandemia en el mes del amor puede ayudarnos a conectar con el otro y a ser más creativos. Pero creo que el amor merece ser celebrado siempre y si San Valentín además nos inspira para dar lo mejor de nosotros, pues ¡Viva San Valentín y viva el amor confinado!
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